Razios, Arien, Lana~

-no lo se. por ahora solo se me ah ocurrido hablar contigo por la confianza que te tengo- aquello era curioso que razios le dijera que le tuviera confianza. en general la relacion de ellso dos era para fines practicos:el la llevaba a batallas para saciar su sed de sangre y acostarse de ves en cuando. nada mas y nada menos. -pero ya se me ocurrira algo- dijo el druichii acomodandose para que las heridas no le dolieran tanto

-No se me ocurre ningún consejo, Señor.-Y en ese momento, llegó el equipo médico para curar a Razios tras el cual iba Arien.

-tardaste un poco. bueno supongo que es por esta maldita torre- dijo razios y mientras arien lo examinaba le hizo una seña para que lana la observara y asi pudiera ver el parecido de arien con razios detenidamente

-Lo siento, Razios.-Quejó mientras Lana les observaba. Aunque uno era chico y el otro chica las diferencias en el color de las pupilas, del cabello, de la tez... incluso en el habla, eran mínimas.

-descuida- dijo razios dando un beso a arien. lana le observo con cierta desconfianza "si lo se....es mi hija.....pero aun la quiero" dijo razios mentalmente a lana

-Iré a meditar, señor.-Se desatendió marchándose de ahí.

Arien simplemente devolvió el beso.

-hay mucho que planear arien- dijo razios -no te gustaria ir a los desiertos y tomar venganza de esos malditos adoradores por todo lo que te hicieron?- dijo razios -le enseñaremos a esos tarados quienes son lso druichiis- dijo mirandola con calma

-Me encantaría, Razios.

-por esto te quiero- dijo razios besandola -siempre se que podre contar contigo a mi lado- dijo con una sonrisa mientras lla veia al rostro. le importaba una mierda que fuera su hija. el estaria con ella

Ella le miró sonriente.

-Te amo, Razios.

-yo tambien- dijo el druichii besandola profundamente -yo tambien te amo y puedes contar conmigo para todo en esta vida de sangre y conquista-

Se rió y se separó un poco, solo mirándole.

-¿Qué te ocurre hoy? Estas diferente.

-estoy feliz de haber conseguido el titulo. eso es todo- dijo con alegria mientras se levantaba -mejora mi estatus social y me da opotunidad de llevar rapidamente mi plan-

-Me alegroq ue todo te saliera bien, Razios.-Le sonrió.

-bien...ahora- y justo en ese momento tocaron la puerta. -QUE??- grito razios. pensaba pasar un momento con arien y lo interrumpe...¿encerio porque mierda le pasaba eso?

-perdon. pero tiene preparativos que hacer- dijo una voz y al abrir pudo comprobar quien era:val hir uno de sus rivales que colabroaba con el por necesidad. a razios no le agradaba para nada. no es porque era un cabron hijo de puta sino porque era un hijo de ptua cabron. lo odiaba con todo su ser pero tenia razon -arien ve con ness y avisale que ya llegue....mejor aun. espia a ver que hace y luego dile en el mejor momento-

Arien asintió y se marchó.

-ven- dijo raiden a nathal -iremos ver a la reina eterna. pues quiere agradecerte por tu ayuda- dijo el dios del trueno a la elfa mientras se movian a direcion a verla

Nathan le siguió, emocionada.

mientras caminaban vio que el aroma se cargaba de olores agradables y vio una decena de luces mientras se aceraba. era una tienda de gran tamaño y bellos colores en donde elfos bailaban al son de la naturaleza -veo que la reina esta dando una de sus fiestas comunes- dijo raiden mirando a nathal -ve. yo tengo que ir por un momento a cargar mi energia-

Nathal liberó a Thor y se adentró en aquella fiesta mirándolo todo entusiasmada. Pronto estuvo frente a la reina, frente a quien hizo una reverencia.

-tu debes ser nathal- dijo la reina eterna quien demostraba tener una belleza de legendas -si...te conosco. la mayoria aqui te conoce bien. tu periplo ah sido bien recibido entre los elfos- dijo con una sonrisa -la guerra. aquella que ah logrado enfrentar grandes amenazas y seguir en pie-

-Así es, mi Reina.-Asintió Nathal con total respeto hacía la otra.-Es un honor para mi tener el placer de conoceros al fin.-Añadió.

-despues de lo que has hecho. es de en realidad al contrario- dijo y le toco en la frente a lo cual nathal sintio una oleada de calides y tranquilidad asi como mucha paz. tal era el poder de la reina eterna -nosotros tenemos mucho que agradecerte. se que el mundo es oscuro y que la guerra no parece tener fin(y es posible que nunca la tenga) pero por hoy. quedate y encuentra paz-

-Así lo haré, Mi Reina. Aunque mucho me temo, que no sé bailar.-Finalizó agachando la cabeza.

-cuando combates. bailas y danzas- dijo sonriendo -el baile de guerra que haces. quien te lo enseño?- pregunto mientras se sentaba en una silla comoda y hecho especialmente para ella