La piedra del deseo.

-ya no importa- dijo el druichi recostando la cabeza -sencillamente ya no importa-

-A mi me importa y mucho, Razios-le espetó.-Encajaba conmigo a la perfección, no podré encontrar ninguna sustituta en ningún lado.

-pero deberas hacerlo- respondio -pues ya la perdiste y nada mas podemos hacer-

Se tumbó encima de la cama y miró al techo.

-mañana veremos que hacer. mas es evidente que tu nivel con la espada deja que desear. pero mañana veremos que podemos hacer- dijo el druichi mientras trataba de dormir

Se llevó una mano al pecho.
-Últimamente no soy yo-dijo sin más.-Siento que no soy yo...

-porque sientes eso?- pregunto razios levemente preocupado por la semi-elfa

-Desde qué sé que parte de mi es Druichi, tengo miedo de que salga a flote y... supongo que no le meto la suficiente garra a las batallas-confesó.

-pero no puedes vivir asi. con ese temor. pues a este paso te dominara totalmente- dijo el elfo oscuro mirando a la pared

-¿Cómo quieres que me lo quite? ¿Sabes como me he sentido antes de la batalla, cuando le has dicho aquello a Everton?-le preguntó.-No quiero ser eso-y volvió a llorar.-No quiero ser eso...

-te dije que no te gustaria oir lo que es un elfo oscuro. sencillamente no es algo que alguien quiera escuchar-

-Quería saber, quería entender a mi madre, Razios.-le dijo mirándole.-Quería entenderla porque ella vivió con ellos, convivió.

-¿realmente queria entenderla?- respondio -o sencillamente buscar una respuesta alentadora la cual te quite el peso que singinficaba tener la parte que tienes?-

-Has dado en el clavo, Razios.-Dijo ella regresando la mirada a su escudo.-Desde que me curaste la enfermedad y desde que me eteré de mi alma druichi, no puedo dejar de pensar en ella, de temerla... supongo que lo mio es masoquismo-sonrió tristemente.

-lo cual ironicamente. es una cualidad druichii- respondio razios con una broma de mal gusto. y el mal momento

-No hace gracia, Razios-le espetó lanzándole el cojín.-No hace ni pizca de gracia.

-pues es mejor eso a que te hundas en la tristeza- respondio -al menos hace que te enfoques en algo-

Se secó las lágrimas como pudo y luego observó su trage élfico y lo acarició con las llemas de los dedos, con delicadeza.

razios solo suspiro y se apresuro a dormir. pues eso es todo lo que podian hacer de verdad

No tardó en dormirse ella también.

la mañana llego de manera desgradable. al menos para razios que a diferencia de nathal no desayuno. sino que busco que hacer ahora que el barco se iba ido y tambien tenia que buscar la forma de ganar dinero para otra espada para nathal

Pronto Nathal le alcanzó.
-"Lo siento"-le dijo con la mente, pues era una loba.-"lo siento mucho, razios. Todo fue mi culpa".

-"no importa"- dijo el elfo oscuro -"pero nunca habia visto a alguien con esa habilidad defensiva. adema un humano con esa tonalidad de piel....es interesante"- mas fuera de eso miro a la loba a los ojos -"ve a ver a everton y habla con el. a ver si aun esta dispuesto. y toma"- dijo pasandole una bolsa -"compra algo para comer y desayuna con el. y por el amor de los dioses. deja de estar tranformada aqui"- dicho esto el elfo oscuro se marcho

Nathal tomó la bolsa ya siendo humana y fue en busca de Everton, a quien encontró en la playa.

mientras razios fue a tratar de hablar con la hechizera. para resolver el asunto del barco. aunque algo le diria que eso tendria un precio. un precio que le molestaria pagar