Viaje sin Rumbo

-dime cuales son las naciones que hay ?- dijo trax sentandose en una silla de oro que acababa de aparecer por ahi

-El Reino del Hielo, la Ciudad del Fuego, la Nación del Agua, el Templo de la Luz, la Tierra de la oscuridad, el País del Viento y la Región de la Tierra.-Contestó nombrando todas las naciones que conocía, aunque, al pronunciar la nación de la oscuridad, una sombra apareció ante su rostro.

-entonces no sabes del reino del vacio-dijo trax -no me solprende-

-Sé donde estamos... pero no lo conocía, como has constatado. Ahora... ¿me dejarás seguir con mi venganza?-le preguntó exasperada.

-no no lo hare. te dejare ayudar pero al momento de matar slediran no sera tuyo- dijo trax -asi de simple-

-Él no tenía derecho a matar a una simple familia de campesinos-rugió ella colérica. -No tenía derecho. No habíamos hecho nada-estaba llorando-nunca habíamos molestado a los del fuego, jamás. Pero llegaron sus soldados y quemaron la granja... sin miramientos. ¡¡No tenían derecho!! y por eso acabaré con él.-Sentenció.

-supongo que crees eso- dijo trax -pero te dire que esas son consecuencias de la guerra y tienes que aceptarlo-

-Jamás lo aceptaré... no sabes lo duro que fue para mi seguir adelante, olvidar todo lo que había pasado, mi procedencia e incluso enterrar mi propio nombre bajo una máscara de falsedad para que no me persiguieran. -Le miró con los ojos vidriosos-Cada noche, me pregunto si podré seguir viendo la luz del sol o moriré en manos del ejército de sleridan.-susurró.

-como dije antes productos de la guerra. asi de simple- dijo trax -no tendras de otra. nada que aceptarlo-

-Lo he atesorado desde niña, tanto tiempo que ahora soy incapaz de renunciar a aquello que tanto deseo. Lo siento.

-atesorar que?. matar a alguien?. o solo ver su cadaver en el suelo?- dijo trax calmadamente -dime-

-Hacerle sufrir lo que yo he sufrido-contestó con la mirada chispeante. -De todas todas, eliminar a su familia, eliminar a la persona más ayegada a él... que sepa lo que es la soledad, en la que me sumió.

-veo que no conoces a sleridan- dijo trax -no hay forma de torturarle- dijo mientres se calmaba

Rugió con frustración y luego empezó a andar.

-Dejádme sola... necesito estar sola-y se escondió tras el saliente de una roca. Se agazapó y se quedó mirando en lontananza mientras las lágrimas le escocían por las mejillas, aunque no hizo nada para detenerlas.

-sola?- dijo trax apareciendo para solpresa de ello -pero si eso hay aqui y debes entender a sleridan antes de querer combatirlo-

-¿No puedes dejarme unos instantes de intimidad?-le preguntó asqueada-¿sabes lo que significa intimidad, Trax?-le preguntó-Creo que no.

-es dificil la palabra intimidad despues de lo que pase- dijo trax -asi que no me pidas eso-

Ella le miró furiosa y enfrascó la mirada bajo la capucha de su capa.

-Vamos con los demás-musitó más cabreada que otra cosa.

-como quieras- dijo trax mientras caminaba tranquilamente

Mientras andaba, miraba su mano derecha aun fascinada de que no tuviera la horrorosa quemadura en ella. Sacó sus garras y volvió a esconderlas.-¿Cómo es que en este país mi garra está curada?-le preguntó a Trax.

-porque aqui se muestra muchas cosas. como es alguien en realidad- dijo trax mientras tocava su calaverico rostro

-Ya veo-dijo sin más-Estoy segura que sí volvemos al resto del mundo, mi garra me dolerá en demasia.

-no lo se. siempre queda algo de este lugar. no prometo que deje de doler. pero no sera como antes eso lo aseguro- dijo trax cakmadamente

-Mientras no reaparezca la fea quemadura, podré soportarlo-le contestó ella aun debajo de la capucha.

-que aparecera. aparecera pero sera mas debil que la otra ves- dijo trax de manera aburrida