era del armageddon

Caí al suelo de bruces y esta vez, no me fusioné. Me quedé tendida sin apenas poder moverme. Me había dado casi de lleno.

me teletransporte cerca de jeann -eso es todo?- pregunten mientras manetenia mis estado alerta. si algo sabia de la tierra era que siempre podia darte solpresa de cualquier parte

La cabeza me daba vueltas y logré mantener mi mirada en Estegio.

me acerce a ella y sencillamente la abraze. ya habia sido demasiado y solo queria estar con ella ahora.

-Lo siento. Todavía no puedo superar el golpe de un rayo.-Confesó al rato.

-para ser sincero- dije mientras veia su rostro -aun no se como enfrentarme a la furia de la tierra-

-Me pasa lo mismo-sonreí. -Aunque la controlo, cuando enfurezco... siento que no la controlo, que es ella quien me controla.

-sera mejor que descanses- dije mientras me sentiaba en una roca y veia a jeann sin fuerzas en el suelo -luego veremos que hacer aqui-

-Con Isis me pasaba lo mismo. Me hacía volar transformada en meteorito en un mar de rayos y truenos. Cuando me alcanzaba uno, rebotaba contra el suelo y era incapaz de incorporarme de nuevo-Expliqué.

-al menos no te tenias que enfrentar a 4 zombis furiosos y a un dios del trueno que le importaba poco si morias o no- dije mientras recordaba mi breve entrenamiento con raiden

Me incorporé al rato como pude y le miré.
-Yo te enseño a evadir mis ataques sorpresa y tu me enseñas a superar los golpes dados por los rayos. ¿Qué te parece?-le pregunté-

-tal ves- dije mientras levantaba -creo que no habria ningun problema con eso-

-¿Empezamos?-terminé de incorporarme.

-las damas primero- dije mientras reacomodaba mis pensamientos. -cuando quieras-

Le expliqué algunos truquillos y me fusioné con la tierra, a la espera a que me interceptara.

-pues debes saber. que la tierra atre a los rayos. asi que lo que debes hacer es buscar un material que no los atraiga. ese es el gran secreto- dije riendo

Le golpeó una pelota de diamante y reaparecí frente a él, recubierta de ese material.
-¿Algo más?-le pregunté, levemente molesta.

-si- dije mientras me recuperaba -ten cuidado con el magnetismo. aunque no soy tan fuerte. seres como raiden puden incluso magnetizar particulas tan pequeñas como los minerales o hierro en nosotros. asi que es de sumo cuidado no acercartele-

-Lo tendré en cuenta, Estegio.-De repente, y sin saber porqué, me abracé a él y le besé desesperada.

me aferre a ella fuertemente. mientras respondia a aquel beso improvisado que me habia dado jeann.

-Te quiero, Estegio-le susurré cuando detuve el beso, me separé y empecé a andar.

-yo tambien- dije suspirando. tantas cosas que habia pasado con ella. y aun no la entendia. supongo que el dicho es cierto. "es mas facil conocer los secretos de los dioses que la mente de una mujer"

Escondí mi báculo y abandoné la protección con vida del bosque y me interné en el desierto de nuevo.

-no la entiendo- dije en voz baja. -sencillamente no la entiendo- dije mientras la seguia y salia del bosque y este parecia como si nunca hubiera estado ahi. solo eso faltartia que fuera una ilusion o algo asi

-Hay veces en los que la Tierra anhela estar sola, otros en los que anhela reencontrarse con los suyos y yo...-se detuvó y le encaró con una media sonrisa de tristeza. -No sé donde meter el equilibrio justo.