La piedra del deseo.

Thor se le quedó mirando y, por unos momentos, se vislumbró una tristeza infinita en sus ojos.

Se separó de Arien y se acercó a Andrew, recostando su cabeza en la pierna de él con la mirada triste.

-es una vida dura no?- dijo el bárbaro acarisiando el pelaje de thor. -es una vida muy dura- repitio

Thor asintió y luego miró a Arien para volver a mirarle, no se movería de su lado.

-crees que deberia dejarla?- dijo mostrando el dibujo -se que debería pero....bueno. no importa- fue todo lo que pudo decir

-Nunca se es tarde... -fue lo único que escuchó Andrew aunque Arien continuaba durmiendo. Aquella voz había sonado a hombre.-Nunca pierdas tú fé.

andrew. no entendió la voz y sencillamente lo tomo como falta de sueño. así que sencillamente decidió dormirse. si hubiera queda mas tiempo habría notado que alguien lo estaba vigilando

Así fue como Thor regresó con Arien, atento a todo lo que pudiera ocurrir.

asi que la presencia se fue. el porque apareció no se sabe. aunque tal ves pronto la razon...

Arien se despertó nada más los primeros rayos de sol incidieron en su rostro. Bostezó, se estiró y atizó las llamas para preparar algún desayuno con el que comenzar el día con buen pie. A su lado, Thor movía alegre la cola.

-buen dia- dijo andrew despertando -habrá algo mas de tranquilidad por ahora. ¿tienes algo para comer o tendremos que esforzarnos por ello?-

-Encontré fruta y también un conejo.-Señaló la hoguera.-¿Qué te apetece?

-eso estará bien- dijo sonriendo mientras sacaba una botella con un liquido verde brillante -toma. es vino de veneno de serpiente. claro espero que no te moleste tomarlo a esta hora-

Se echó para atrás.

-¿El qué?-Hizo mala cara.-¿Cómo... ? Por díos, que cosas más raras teneís los humanos.-Sonrió nerviosa.

-lo siento. pero no vivimos miles de años como ustedes- menciono -así que vive un poco-

Aun un tanto reacia fue a tomar la botella pero bajó la mano antes.

-Lo siento.-Se disculpó tomando una pieza de fruta y mordisqueándola.-Te puedo parecer adulta pero, solo soy una cria para los de mi raza. Apenas tengo 238 años.

-y no conoces a hur?- dijo algo sorprendido -me pregunto en donde has estado- dijo con rareza a la eldar

-Escuché un día a medias escondida de boca de unos ancianos-comentó-En cambio sí que conozco al Díos Emperador bueno, de él he oido hablar más, no es que le conozca personalmente.-Le sacó la lengua.

-vaya con esa actitud. no me sorprende que estés sola. bueno y por eso y claramente por la poca masculinidad por la que son conocidos los elfos- dijo con una sonrisa

-Oye.-Se quejó sonriendo.-Aunque no tengo porqué quejarme, puesto que no soy elfo, sino elfa.-Se rió ligéramente.-En fin, ¿desayunas o partimos ya?

En ese momento se dio cuenta de que Andrew no era tan malo como siempre había pensado, solo... tendría que haberle conocido un poco más a fondo. Suspiró.

-bueno. tomaremos esto mas tarde- dijo guardando la botella -creo que sera mejor desayunar ya- un ambiente mas tranquilo se sintió en el aire ahora que ambos estaban tranquilos

Tomó otra pieza de fruta y se la comió despacito mientras Thor reposaba a sus pies.

-¿Está bueno el conejo?-le preguntó al rato.

-después de lo que pase en lo desiertos. toda la comida me sabe a gloria la verdad- andrew miro un momento a thor -y el no come?-

-Es mi alma protectora.-Sonrió.-Puedes tocarle, acariciarle y hablarle pero al ser un alma no come, no duerme y no bebe.-Explicó.

-eh dado a que no pienso protegerte. no totalmente al menos- pregunto -tienes algún tipo de arma?-

Desenfundó su espada que llevaba en el cinto y le mostró el arco en la otra mano.

-¿Satisfecho?-le dijo de nuevo seria.-¿Y tú?-Dijo guardándolo todo con espasmosa velocidad.