La piedra del deseo.

Nathal se asustó.

-A... ¿Andrew?-preguntó todavía en el suelo, con los ojos humedecidos.

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Lana se levantó mirando a Andrew.

-¿Qué narices haces?-gruñó.

andrew se retiro rapidamente corriendo hacia el bosque. al lugar donde habia salido la voz....

razios se levanto y tiro la espada que habia tomado a lana -dejemoslo asi por ahora- dijo el druichii mientras caminaba. con un tono de molestia en su voz

Nada más agarró la espada, corrió a abrazar a su hermana, buscando consolarla.

razios se sento en el suelo para suspirar. mientras veia a ambas semi-elfas con una expresion de aburrimiento. perdio su arma,la chica y ahora no solo nathal no la amaba sino que ahora tenia que tolerar a su hermana.....esto no podia ser peor

Cuando Nathal estuvo más tranquila, Lana se separó de ella y miró hacía el bosque.

-Razios, cuí...-le miró.-Mejor no. ¿Puedes ir a ver donde está Andrew?

-claro...- dijo razios. mientras mas lejos estuviera de ambas...mucho pero mucho mejor. asi que agarrando su daga fue hacia el bosque para buscar a andrew....no es que le importara pero algo tenia que hacer

-Vigila con Razios.-Le pidió Nathal a su hermana.
-¿Por qué?
-Porque es un animal herido en el orgullo y además, ha perdido a Arien... Creo que está muy afectado.

Lana frunció el ceño y miró al interior del bosque, y suspiró.

-Me ganaré su confianza. -Dijo segura de sí misma.-Aunque me deje la piel en ello.

razios siguió caminando mientras cada ves sentia mas rabia consigo mismo. paracia no importarle que no tenia nada mas que una daga para defenderse....parecia abatido totalmente

Finalmente se levantó y decidió seguirle.

siguio caminando hasta que sencillamente no pudo mas...se paro a un arbol y comenzo a golpearlo por la ira que tenia

-todo...no me queda NADA!- grito con una furia que rebasaba todo. -perdi mi posicion en naggaroht por seguir a una chica...perdí mi mision y mi rumbo por seguir a una semi-elfa quien resulta no me amaba...y ahora tengo que lidiar con su maldita hermana- estaba hablando solo como para mostrar lo terriblemente comico que resultaba todo -y ahora no me queda nada.....- ene se momento tuvo un estallido de furia y comenzo a golpear con fuerza y cuidado al arbol. sin importarle si se rompia los dedos en el maldito proceso.

Se detuvo tras un árbol y escuchó todo y, rápidamente ahogó las ganas que tenía de correr a abrazarle -impulso humano- y quedar escondido detrás del mismo.

Crispó un puño, se suponía que los druiichis no se consolaban los unos a los otros. Rápidamente tomó una determinación. Sacó su espada y se presentó frente a Razios rodeando los árboles para tal fin. Le puso la espada en el cuello mirándole serio.

-No soy una druiichi total pero... Quiero hacerte una proposición, druiichi.

-y si me niego que haras?- dijo mirando a lana a sus ojos -matarme?...hazlo si quieres- lo que lana miro era algo que no comprendia:desesperanza. razios habia perdido todo enfrentadose a cosas que eran mas fuertes que el. nathal se habia hecho mas fuerte cada ves y recuperaba cada ves algo muy parecido a una familia. pero el solo habia perdido personas por intentar la estupidez de querer a alguien. morir ya no lucia tan malo...

-De momento todavía me sirves-dijo secamente- no pienso quitarte la vida tan rápidamente.-Apartó la espada y la enfundó.

-Quiero fundar una tribu Druiichi y, como ves soy chica y tú eres chico... ¿Me sigues?

-aunque aceptara- dijo razios con una risa -no es necesario....solo tienes que ir a la fuente de todos los druichiis...tienes que ir a naggaroht-

Se rió.

-Tiene gracia, Razios. ¿Crees que aceptarían a una semi-druiichi? Antes me matarían que aceptarían unirse a mi. -Negó con la cabeza. -No, eres el único que me interesa.

-no son altos elfos...- dijo razios -ahi se ganan el respecto de la unica manera civilizada...con la sangre...hay una gran guerra...dales armas y riquezas a malekith nuestro gobernante y aunque fueras mitad enana mitad lagarto cosa que creo que eres por tu personalidad te dejaran...como ves para los druichii odiamos a todas las demas razas....solo en teoria. es por eso que somos los mas civilizados de todos los elfos-

-Por favor...-puso los ojos en blanco y bufó. Le agarró del cuello y le estampó contra el árbol apretándose después encima de él.-¿Sabes qué quiero? -Le susurró al oido- Quiero al Druiichi que conoció a mi hermana... Quiero que seas él...-Apretó su cuello con fuerza-¿Qué tengo que hacer para tenerle?

-porque tanto interés en eso?- dijo razios mirandole a la cara con la expresion desafiante de toda la vida y con el brillo de rabia en sus ojos. si lana buscaba al druichii dentro de el. lo estaba consiguiendo -porque necesitas de mi?- era la pregunta que no entendia. teniendo a cualquiera....¿porque el?

-Porque siempre me has atraido, maldito druichi. Siempre he visto desde el interior y la mirada enturbiada de mi hermana quien eras y siempre... quise estar contigo.

-o tienes que estar bromeando....- dijo razios ante la declaración. ya sea habia enamorado de una humana y de una semi-elfa....pero que una druichii sintiera algo por el?. eso rozaba lo absurdo completamente

-Si estoy bromeando-le dio un rodillazo y, luego lo volvió a apoyar en el árbol -Pero... ¿sabes? Antes me has dicho que eligiera o ser humana o druiichi elegí como mi hermana... ¿Serás el druichi de antes por mi?

en ese momento la mano de razios se movio y rodeo el cuello de lana y la alzo un poco -ya eh sido todo lo que las demas han querido que fuera....asi que si sabes que te conviene solo callate y quita tu brazo de mi cuello- lo curioso es que razios no se daba cuenta de que caia en lo que queria de la semi-druichii. cada momento era mas parecido al druichii que lana conocio atraves de los ojos de su hermana

Sonrió para sus adentros.

Le soltó el cuello pero, sin embargo sus manos rasgaron las vestiduras del druichi.

razios se acerco a ella le la beso. pero no uno de suavidad como a arien o nathal. sino uno mas simple y mas apasionado. pues los druichii no se andaban con sutilidades

Aceptó el beso gustosa mientras sentía la opresión en su cuello. Aquello le gustaba, era tan ella. Con ambas manos, le empezó a intentar rasgar el cuerpo.